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Cristian Vieyra Rivera
Cristian es un niño carismático que comenzó en Pasitos de Luz en 2019 a la edad de 3 años. Ahora tiene 5 años y es conocido en Casa Connor por su enorme sonrisa. Le encanta bailar, escuchar música y participar en actividades acuáticas.
Diagnóstico
A Cristian se le diagnostica hidrocefalia (una acumulación de líquido en el cerebro), tetraplejía espástica (la forma más grave de parálisis cerebral) y le amputaron el brazo izquierdo poco después de nacer. Cuando llegó a Pasitos de Luz, el pequeño Cristian no tenía absolutamente ningún control sobre su cuello o tronco. Podía mover su brazo derecho pero tenía poca o ninguna coordinación, y no podía agarrar ni siquiera los objetos más pequeños. No podía mover las caderas ni las piernas, y no podía darse la vuelta, mientras que su comunicación se limitaba a sonidos y gritos. Cristian también estaba sustancialmente bajo de peso y tuvo que ser alimentado a través de un catéter.
Terapias
Cristian realmente ha progresado desde que comenzó en Pasitos de Luz, gracias al trabajo paciente y solidario de nuestro equipo de personal. Su enorme sonrisa ilumina una habitación y nos encanta tenerlo aquí.
Sus logros han sido una alegría para ver. Ahora es capaz de mantener la cabeza erguida y mirar de lado a lado, además de poder sentarse por períodos cortos de tiempo, darse la vuelta y gatear. Incluso ha comenzado a participar en actividades básicas del salón de clases, jugando juegos que lo animan a usar sus manos. Todos nos emocionamos cuando Cristian dijo sus primeras palabras: mamá, papá y agua. Mientras todavía se alimenta a través de un catéter para ayudarlo a subir de peso, ha comenzado a comer sólidos por sí mismo. Los próximos hitos importantes para Cristian son sentarse sin ayuda y por períodos prolongados de tiempo y, eventualmente, ponerse de pie y tener más control sobre sus movimientos.
Vida Familiar
El pequeño Cristian es parte de una familia muy amorosa de escasos recursos. Vive con su mamá, su papá y sus dos hermanos mayores, Axel y Cristo. Ambos padres trabajan en Pasitos; su mamá Paola en nuestra lavandería y su papá Ignacio como manitas. Sus hermanos, cuando no están en la escuela, se ofrecen como voluntarios y ayudan con las tareas en Casa Connor. A veces los vemos llegar a los cinco en una sola moto pequeña, ya que es el único vehículo que se pueden permitir. Esperamos que algún día tengan algo más seguro para viajar. La familia de Cristian tiene un gran corazón y son miembros valiosos de la familia Pasitos.